Muchos de nosotros tenemos algún allegado con discapacidad. Algunos de ellos son grandes dependientes, con lo que necesitan ayuda o al menos supervisión para el desempeño de la mayor parte de sus actividades básicas de la vida diaria. Para ellos, y dependiendo de su nivel de autoexigencia, de su conciencia de déficit o de su estado anímico, esto puede implicar sentimientos de frustración que mal gestionados lleven a una lucha constante y devastadora contra uno mismo y contra los que les ayudamos en estas tareas.
Es muy fácil contagiarse de este sentimiento y que en nosotros también nazcan el reproche y la culpa, tan malos compañeros de viaje. Entonces nos veremos unos y otros atrapados en un círculo del que no es nada sencillo salir.
En especial en la situación inusual en la que nos encontramos desde que empezó esta pandemia, en la que estamos viendo tan mermada nuestra interacción social, puede hacerse muy cuesta arriba convivir en armonía. Es fundamental no sentirse solos, permitirnos estos sentimientos como algo natural y compartirlos con quien sabemos que nos puede comprender. Por suerte, hoy en día contamos con herramientas de comunicación virtual que pueden evitar no el aislamiento físico, pero sí en muchos casos el emocional. !!USÉMOSLAS!!

“Cuidar de quien quieres pasa por cuidar de uno mismo”
Esta es una frase que llevo grabada a fuego desde hace mucho tiempo. No nos podemos olvidar de que quienes se dedican a cuidar tienen que cuidarse, tanto a nivel emocional como físico. Los profesionales sanitarios que trabajamos con personas dependientes debemos dar respuesta también a estas necesidades, pues nuestro objetivo es mejorar la calidad de vida, no sólo de la persona afectada, sino también de su entorno.
¿Qué podemos hacer al respecto?
En mi caso, la oferta asistencial de Eva Otero Neurofisioterapia incluye el “cuidado del cuidador” dando respuesta a las necesidades de cuidadores y familiares a través de dos vías:
- ofreciendo información y asesoramiento sobre la patología y el manejo de su familiar o persona que está a su cuidado
- interviniendo directamente en los problemas de salud asociados a la carga del trabajo de cuidar
Sin embargo, me parece necesario ofrecer también un espacio en el que las personas cuidadoras puedan compartir experiencias, resolver posibles dudas y, en definitiva, incorporar herramientas útiles para sí mismos, pero también para sus familiares dependientes.
Como bien dice la definición de la OMS, la salud es un estado de completo bienestar físico, mental y social, y por ello, mi compañera Tania Luaces, Neuropsicóloga, y yo misma, hemos decidido sumar esfuerzos poniendo el foco en vosotros, los cuidadores. En esta iniciativa proponemos acompañaros y guiaros en un entorno en el que podáis compartir experiencias, resolver dudas e incorporar recursos y estrategias que os faciliten vuestra tarea en el día a día.
Desafortunadamente en este momento tan particular no podemos ofreceros, como sería nuestra intención, la realización de una actividad grupal presencial, pero prometemos hacerlo en cuanto sea posible. De momento os damos la opción de atenderos de manera individual, o trabajando en grupo vía online.
Cuéntame tu caso y pensaremos en la mejor manera de abordarlo.